martes, 28 de enero de 2014

Chiapas construirá librería José Emilio Pacheco




Tuxtla Gutiérrez.- El Gobierno Estatal y la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH) arrancaron los trabajos de construcción de la primera librería del Fondo de Cultura Económica (FCE), la cual será bautizada con el nombre del escritor mexicano, José Emilio Pacheco, fallecido el pasado domingo por un ataque cardiorrespiratorio.
El gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, fue el encargado de colocar la primera piedra para iniciar la edificación de la librería, así como el levantamiento del Centro Cultural Balún Canán, obras que representan una inversión inicial de 30 millones de pesos de forma conjunta, según divulgó el diario El Universal.
De la misma manera, Velasco Coello afirmó que la lectura es una práctica necesaria para la formación académica de las nuevas generaciones, así como para impulsar el desarrollo mediante la ampliación del conocimiento.



Por su parte, el director del FCE, José Carreño Carlón, aseguró que, tanto el Centro Cultural Balún Canán como la librería José Emilio Pacheco contribuirán a la formación profesional y la restauración del tejido social en la entidad sureña.


Finalmente, el rector de la UNACH, Jaime Valls Esponda, resaltó los beneficios de ambos inmuebles, principalmente, para una comunidad estudiantil que rebasa los 20 mil alumnos de educación superior.
 

lunes, 27 de enero de 2014

El movimiento a favor de la lectura lenta incide en el disfrute de la buena literatura







¿La lectura hace sentirse a las personas bien consigo mismas? ¿Por qué se debe hacer énfasis en la literatura? ¿Las narraciones sólidas ayudan a desarrollar la empatía? ¿Leer despacio aumenta el disfrute de la lectura? ¿La lectura de obras literarias hace a las personas más inteligentes que la lectura de otro tipo de materiales de lectura? Sobre estas cuestiones reflexiona la escritora Maura Kelly en un artículo para el diario The Atlantic, en el que hace un llamamiento en favor del The Slow Books Movement [Movimiento a favor de la lectura lenta].
El objetivo de este movimiento, fundado por el escritor norteamericano I. Alexander Olchowski, es volver a despertar los placeres de la lectura lenta en la sociedad moderna, así como el disfrute de la buena literatura. The Slow Books Movement pretende alentar a las personas a que disminuyan la velocidad de lectura y lean más libros, considerando estas prácticas como un modo de enfrentarse al mundo cada vez más digitalizado en que se enmarca la sociedad moderna. Cada cierto tiempo, el movimiento realiza una selección de títulos, tanto obras clásicas como contemporáneas, que se añade al grupo de novelas que encajan en su filosofía. The Slow Books Movement no se opone a la tecnología por razones puramente nostálgicas o estéticas, pero sí que tiene ciertas normas acerca de qué tipo de materiales de lectura leer, excluyendo las obras no literarias y los artículos de revistas y periódicos de su “filosofía de lectura”.
Partiendo de este hecho, Maura Kelly opina que las obras literarias ayudan a las personas a relajarse mejor que cualquier otro dispositivo electrónico, y agudizan gratamente las mentes e identidades de la sociedad. La autora fundamenta este énfasis en la literatura en el desafío cognitivo que a su parecer produce el juego con el lenguaje, la estructura de la trama, y las imágenes que se encuentran en una obra literaria. A su juicio, todos estos elementos invitan a ver el mundo de una forma diferente, exigen la interpretación de descripciones inusuales, y ejercitan la memoria para recordar personajes y detalles de la trama.
Kelly cita a la escritora científica Annie Murphy Paul, la cual ha informado de que un grupo de neurocientíficos ha encontrado numerosas pruebas de que la lectura de ficción estimula todo tipo de áreas cognitivas, no sólo las regiones lingüísticas, sino también las responsables de la coordinación del movimiento y la interpretación de los olores. Debido a que las obras literarias son mentalmente tan estimulantes y requieren de tal compromiso, afirma Kelly, éstas hacen a las personas más inteligentes que otro tipo de materiales de lectura.
La escritora va más allá y estima que la literatura no sólo hace más inteligentes a las personas, sino que también da forma a sus conciencias e identidades. Según Kelly, las narraciones sólidas ayudan a desarrollar la empatía. La autora cita una investigación realizada por los psicólogos canadienses Keith Oatley y Raymond Mar que sugiere que leer ficción mejora las habilidades sociales, y que los individuos que leen con frecuencia obras de ficción son más capaces de entender a otras personas, empatizar con ellas, y ver el mundo desde su perspectiva.
Kelly considera que con la empatía viene el autoconocimiento. Según ella, el lector, al descubrir afinidades entre él y los personajes literarios, es capaz de comprender mejor quién es, en lo personal y en lo político, lo que quiere cambiar, y lo que le interesa defender.
Maura Kelly cree que la literatura “seria” hace al lector sentirse bien consigo mismo, y según las encuestas, advierte, ver la televisión hace que la gente sea infeliz y sienta remordimientos. Sin embargo, afirma, después de acabar la lectura de un clásico de la literatura el lector siempre se siente satisfecho.
La autora acaba su reflexión con un texto pronunciado por el poeta Joseph Brodsky en su discurso de recepción del Premio Nobel en 1987: "Aunque podemos condenar la persecución de escritores, los actos de censura, la quema de libros, somos impotentes cuando se trata del peor crimen contra la literatura: el no leer libros. Por ese crimen una persona paga con su vida entera; ... una nación… paga con su historia".
 

Bibliotecarios: su misión es empoderar






Cuál es la misión de un bibliotecario o bibliotecaria? Pese a lo que mucha gente piensa, su labor no se limita al préstamo de libros, sino que va más allá. Según manifiesta el bibliotecario Roy Tennant en un artículo publicado en The Digital Shift, el objetivo de estos profesionales es ayudar a las personas a tener vidas más plenas y hacer que las comunidades y la sociedad en general prosperen, es decir empoderarlos.

En su artículo, Tennant ofrece un listado con aquello que ofrecen los bibliotecarios y que beneficia todo el mundo:
  • A las personas: Permiten que la gente pueda adquirir nuevos conocimientos, tenga acceso a recursos que de otra manera estarían lejos de su alcance y ante todo, les muestran su potencial.
  • A las organizaciones: Éstas son más eficientes gracias a la labor de estos profesionales –explica Tennant– ya que les proporcionan los servicios de información necesarios para que puedan sacar el máximo partido a sus recursos humanos y materiales.
  • A las comunidades: Los bibliotecarios –añade– crean y gestionan recursos de las comunidades, lo que hace que sean más potentes y resistentes.
  • A la sociedad: Estos profesionales –continúa– recogen, gestionan, preservan y dan acceso a los recursos necesarios para que los individuos contribuyan a la sociedad como ciudadanos informados, independientemente de los recursos económicos o del estatus social que tengan.
También incluye Tennant un listado de las acciones más destacas que realizan estos profesionales de la información:

Aumentar el conocimiento: Esto quizá sea por lo que son más conocidos los bibliotecarios –comenta Tennant– ya que mediante el préstamo de libros, artículos y otros recursos, los usuarios son capaces de aumentar sus conocimientos.
 
Facilitar el acceso a herramientas: Siempre ha sido una de las labores de las bibliotecas, y aunque hasta ahora se limitaba al préstamo de herramientas, en estos momentos y con la aparición de las nuevas tecnologías, existen casos en los que los usuarios pueden acceder a impresoras 3D.
 
Facilitar el acceso a las redes: Desde la llegada de internet las bibliotecas han sido las primeras en dar acceso a la red de redes a aquellas personas que no podían acceder desde sus casas. Hoy en día –asegura Tennant– es una labor que siguen desarrollando.
 
Ayudar en el desarrollo de las habilidades: Con la crisis económica de los últimos años, las bibliotecas han tenido que reinventarse y encontrar la forma en la que ofrecer readaptación profesional para aquellos que buscan empleo. Se han dado casos –señala Tennant– en los que ofrecen ayuda a personas que abandonaron sus estudios secundarios para que puedan obtener su diploma.
La sociedad ha evolucionado y los bibliotecarios han evolucionado con ella, y este bibliotecario está convencido de que estos profesionales cuentan con la capacidad necesaria para seguir adaptándose y continuar ofreciendo los servicios que son más convenientes para los usuarios.
 


 

Los mejores libros para todos





El Achikoli y el Temilo

De Valentín Peralta

Este hermoso libro, ópera prima producida por Ediciones del Jorobado en coedición con Editorial RM, consta de 80 ejemplares impresos a mano, numerados y firmados por el grabador Artemio Rodríguez.

La historia del Achikoli y el Temilo forma parte del patrimonio cultural de San Jerónimo Amanalco, municipio de Texcoco, Estado de México, donde hasta nuestros días los ancianos la transmiten a los niños y jóvenes en la lengua nativa de la comunidad, el náhuatl.

 En ella se narra el mito del origen de los pueblos nahuas de la región de Texcoco, preservando una versión poco conocida de la fundación de México-Tenochtitlan.

El achikoli y el temilo, Artemio Rodríguez.

Rústica

32 páginas

17 grabados

15 x 20 cm

Edición Español

ISBN: 978-968-5208-07-9

Presentación de El buen uso del español

Se presentó en la Real Academia Española (RAE) El buen uso del español, un libro de norma lingüística, auspiciado por las veintidós academias de la lengua española y destinado a todos los hablantes que experimenten dudas o incertidumbres ortográficas o gramaticales ante el idioma.
Primeramente, se ha celebrado una conferencia de prensa en la sala Rufino José Cuervo, en la que han participado el director de la institución, José Manuel Blecua; el académico y coordinador del proyecto, Salvador Gutiérrez Ordóñez, y Ana Rosa Semprún, directora general de Espasa, editora del libro. Ellos han sido los encargados de dar a conocer a los medios informativos las principales características de la obra.
Salvador Gutiérrez ha señalado que el libro «está destinado al gran público, ya que, al estar redactado de forma didáctica, se convierte en una obra de fácil acceso». Asimismo, ha remarcado que su importancia estriba en la «organización, dividida en 224 bloques temáticos que son autónomos entre sí, de forma que pueden ser leídos y entendidos en distinto orden».
Ana Rosa Semprún se ha referido a la colaboración entre Espasa y la RAE, «que tendrá su momento de esplendor cuando se publique, el año que viene, la vigesimotercera edición del DRAE».
A continuación, ha tenido lugar en el salón de actos de la corporación una sesión con alumnos, profesores y representantes de la Universidad de León, del Colegio Nuestra Señora del Buen Consejo y de los institutos Ágora, Ramiro de Maeztu, Cervantes, Margarita Salas, Atenea, Severo Ochoa, Luis Vives, Ortega y Gasset y Luis García Berlanga, todos de Madrid. Además del director y de Salvador Gutiérrez —quien ha explicado a los estudiantes las finalidades y contenido del libro—, han intervenido otros tres académicos: los escritores Soledad Puértolas, Luis Mateo Díez y José María Merino.
Soledad Puértolas ha hecho hincapié en el hecho de que «el lenguaje es uno de los juegos más esenciales y que más definen a las personas». No obstante, ha recordado que «un juego sin reglas no es un juego. De ahí la importancia de El buen uso del español, ya que aquí es donde encontramos esas reglas».
Por su parte, José María Merino ha destacado que «los seres humanos lo somos porque tenemos la palabra. Si la perdemos, desaparecemos. Pero estas palabras se rigen por unas normas de uso, que las encontramos en este libro».
Luis Mateo Díez ha subrayado que los creadores, aun siendo «francotiradores del lenguaje», están «muy interesados en la norma, porque es más importante cómo uno se expresa que lo que es».
Seguidamente, los alumnos de la Universidad de León han tenido la oportunidad de realizar una serie de preguntas a los cinco académicos participantes.
Una vez finalizado el acto, los asistentes han podido visitar las principales dependencias de la institución, como el salón de plenos, la sala de directores y las bibliotecas.

Llegará a las librerías del país "El hombre dinero", de Mario Bellatin




Cronica Hoy.- "El hombre dinero", novela del escritor mexicano Mario Bellatin en la que los recuerdos se aglomeran en la mente del personaje central, llegará a las librerías del país el próximo 27 de enero.
 
En la trama, mientras ve correr a sus galgas por el bosque, un hombre comienza a recordar de manera tal vez desordenada múltiples episodios de su vida que han confluido para conducirlo, lentamente, al momento preciso en que se encuentra.
 
Recuerda cómo su nacimiento, con un extraño síndrome, lo marcó desde niño, al igual que a su familia pues, su madre tuvo que crear un cuadro asmático para el hijo, ya que le era imposible definirse como la madre de un niño quizá mutante.
 
Regresa también el recuerdo recurrente de un personaje clave de su infancia, el "Padre Felipe", quien tiene que defender el honor de su madre ante un estudiante que la insulta.
 
Asimismo, el hombre rememora su amistad con el fotógrafo invidente "Paco Grande", quien es encarcelado por traficar grandes cantidades de marihuana en una avioneta que termina en un accidente, y tiene también el recuerdo de cuando iba a formar parte de un cartel en una calle de Manhattan.
 
Ante todas esas circunstancias, ¿Cuál es el vínculo que articula a éstas y otras múltiples historias que se presentan como caóticas en la mente del narrador? Una figura recurrente que aparecía en sueños de su padre: "El hombre dinero".
 
"El hombre dinero" se dedicaba, por todos los medios, a acumular riquezas en un oscuro departamento destinado para esos fines. "El dinero se mueve", "El dinero está vivo", repetía mucho "El hombre dinero" en el sueño recurrente del padre.
 
Estaba poseído por el afán de poseer "todo el dinero del mundo", "por el gusto de recolectar la mayor parte posible de dinero", incluidos unos extraños billetes con los rostros de Cervantes, Dante, Shakespeare y otros escritores legendarios.
 
Con una angustiante parsimonia, el mundo de "El hombre dinero" se desmorona ante la mirada de un gato llamado "Jeremías", quien aparece como una especie de presencia demoniaca encargada de atormentarlo por su desmedida ambición.
 
Sobre el autor se puede mencionar que tiene más de 40 libros publicados, su obra ha sido traducida a 15 idiomas y ha sido distinguido con los premios "Mazatlán", "Xavier Villaurrutia", "Barbara Gittings Literature Award" y "Antonin Artaud" por su obra "Disecado".
 
Estudió Teología y Cine, practica el sufismo, es autor de "El libro uruguayo de los muertos" (2012) y "Gallinas de madera" (2013), y fue curador honorario de "Documenta 13". Hoy, su gran proyecto es "Los Cien Mil Libros de Bellatin".

Inicia programa cultural para usuarios del Metro

 


Milenio.- Para acercar la cultura a los 5.3 millones de usuarios diarios del Sistema de Transporte Colectivo Metro (STC), se dio a conocer el programa Cultura en Líneas 2014, con un presupuesto de cuatro millones de pesos, monto otorgado por la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados.
 
El proyecto, impulsado por el Metro y la Secretaría de Cultura capitalina, se desarrollará en 45 estaciones de las 12 líneas del STC, aludiendo a los 45 años de vida de este medio de transporte, explicó Alfonso Suárez del Real, subdirector general de Administración y Finanzas del Metro.
 
Durante la presentación del programa de actividades, el secretario de Cultura, Eduardo Vázquez Martín, se refirió al programa Entre Líneas, conformado por tres ejes: Un Metro de Lectura; el programa de descargas de libros digitales Lée-Me, y la conmemoración de los centenarios de Efraín Huerta, Octavio Paz y José Revueltas.
 
Con Un Metro de Lectura, la pretensión de la secretaría es difundir la obra literaria de reconocidos autores entre los usuarios, para lo cual repartirá un millón de ejemplares de la colección editorial Había otra vez.
 
Esta colección está conformada por los títulos El ciempiés y la araña, de Juan Gelman; Sábado, de Alfonsina Storni; El espejo de los ecos, de José Emilio Pacheco; Masa, de César Vallejo, y Nocturno, de Rafael Alberti.
 
Un total de 200 mil ejemplares de cada título se distribuirán en cinco estaciones del Metro durante ocho semanas, con el fin de que en un plazo de 10 meses se concluya la distribución del millón de ejemplares en 25 estaciones.
 
Se abren también las estaciones del Metro para todos los museos de la Ciudad de México interesados en acoger esta iniciativa, agregó el secretario de Cultura.
 
Según Joel Ortega, director del STC, la Ciudad de México es un espacio de libertad, por lo que en el Metro se ha formado una cooperativa cultural integrada por artistas, promotores e instituciones, lo que garantiza la inclusión social.
 
“Es la primera vez en la historia del STC que se logra una gestión de cuatro millones de pesos a través de la Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados, gracias a la cooperativa, que cuenta con un Comité de Contenidos y un Consejo Curatorial”, dijo Ortega.
 
Suárez del Real calcula que se ofrecerán aproximadamente dos mil 430 actividades, si en cada una de las 45 estaciones se ofrece una actividad cultural a la semana.
 
Este programa pretende sorprender a los pasajeros con asaltos artísticos, teatrales, operísticos y literarios; asimismo se cuenta con la iniciativa Ponte la del Metro, que busca, junto con los Claustrófobos, egresados de la Universidad del Claustro de Sor Juana, fomentar una cultura de civilidad y respeto entre los usuarios a través de intervenciones lúdicas.
 
Se le dará un gran impulso a la línea 12 para convertirla en la línea cultural del STC.
 
Suárez del Real adelantó que se realizará un nuevo mural en el STC, el que se sumará a los 57 ya existentes, siempre y cuando la propuesta sea valorada por el Comité y el Consejo Curatorial.
 
“El mural ya está elegido; es para la Línea 12, en Periférico Norte. Será realizado en mosaico por artesanos de Tlaquepaque, y se llama La historia del tranvía, el ferrocarril y el Metro en la Ciudad de México. Les llevará unos ochos meses, y ahora estamos en el proceso administrativo”.
 
Las primeras actividades se desarrollaron en la estación San Lázaro, un concierto impulsado por la Fundación Cultural UNAM, y en La Raza, donde se realizó una actividad en homenaje al cineasta Sergio Ramírez.
 
Mañana se realizará un asalto teatral en el Metro Ermita, a las 11:00 horas.

Muere el escritor José Emilio Pacheco

 
El Universal.- "Con enorme pesar tengo que decirles que mi padre murió hace unos 20 minutos. Se fue muy tranquilo, se fue en paz, murió en la raya como él hubiera querido", señaló Laura Emilia Pacheco, al dar a conocer el fallecimiento de su padre, el poeta, narrador, ensayista y traductor mexicano José Emilio Pacheco.
 
Víctima de un paro cardiorrespiratorio, el autor de "Las Batallas en el Desierto", falleció este domingo 26 de enero por la  tarde alrededor de las 18:20 horas, en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, a los 74 años de edad.
 
Sus restos serán velados a partir de las 12:00 horas del lunes en el Colegio Nacional, del que el intelectual nacido el 30 de junio de 1939, fue miembro desde 1986 hasta su muerte.
 
Laura Emilia Pacheco, quien siempre se mantuvo acompañada de su esposo Fernando García Ramírez, y del editor Marcelo Uribe, señaló: "el viernes terminó de escribir su ‘Inventario', que escribió para un amigo querido, que era Juan Gelman. Eso es lo que hacía todas las noches. Se acostó a dormir y ya no despertó."
 
Visiblemente afectada, tanto que al principio tuvo que hacer una pausa para anunciar la muerte del autor de "Los Elementos de la Noche", Laura Emilia Pacheco agradeció las muestras de afecto y llamó a los mexicanos y lectores que querían a su padre, que eran muchos, a que lo acompañen mañana en el Colegio Nacional.

jueves, 23 de enero de 2014

Lanzan red social para los amantes de la lectura




El Universal.- La Fundación Germán Sánchez Ruipérez acaba de lanzar Lectyo.com, un ecosistema digital en el que participan los profesionales de la lectura y los libros, así como personas apasionadas por leer.
 
Según informa la Fundación Germán Sánchez Ruipérez, durante los tres meses en los que esta red social especializada ha empezado a funcionado en pruebas, "casi dos mil personas de España, Portugal y Latinoamérica se han registrado y han empezado a compartir contenidos y opiniones en español a través de un fenómeno que se ha disparado de boca a oreja".
 
Los primeros usuarios -explica un comunicado de esta entidad- corresponden mayoritariamente a bibliotecarios, diecisiete 17 por ciento; editores, un quince por ciento; ilustradores, un doce por ciento; libreros, once por ciento, y libreros y maestros un siete por ciento, respectivamente.
 
El registro en Lectyo.com es completamente gratuito y permite publicar ideas, noticias, imágenes o vídeos, comentar las publicaciones de los demás, descargar eBooks sobre bibliotecas, edición digital, librerías, ilustración y otros temas que se irán incorporando.
 
Asimismo hay una sección de noticias y una selección de asuntos para el debate, que pueden ser votados y comentados.
 
Aunque hasta ahora la aplicación estaba en fase de desarrollo, se ha producido la incorporación espontánea de grupos de usuarios como ilustradores, libreros, bibliotecarios o blogueros de una forma viral que se ha extendido al continente americano.
 
Actualmente se están formándose grupos de debate -llamados tertulias- sobre temas concretos (ilustración, literatura de viajes o de promoción de la lectura para familias o clubes de lectura virtuales).
 
La Fundación Sánchez Ruipérez concluye que la apuesta de Lectyo.com es hacer convivir lo profesional con la pasión por los libros y lo más serio con lo distendido.

Impulsan centros de lectura


Jesús Alejo Santiago.- Milenio. Casi al terminar 2013, el director general de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (DGP-Conaculta), Ricardo Cayuela Gally, reconoció que la institución a su cargo debía llamarse "dirección general del libro y la lectura, porque cae en su área todo lo que tiene que ver con el fomento a la lectura".
 
Dentro de su programa de actividades trata de una tarea fundamental, cuyos resultados podrían medirse tan solo por un dato: durante el año pasado participaron más de 7 millones 232 mil personas en alguna de las actividades relacionadas con la lectura, desde el Programa Nacional Salas de Lectura, los Paralibros, los Bicilibros y ahora los Centros de Lectura y Formación Lectora, que se van a impulsar a lo largo de la presente administración.
 
De acuerdo con Erick Jiménez, director de Fomento a la Lectura de la DGP-Conaculta, se trata de una evolución del Programa Nacional Salas de Lectura, que tiene un objetivo rural, donde un mediador reúne a 20 de sus ciudadanos para comenzar con el fomento a la lectura.
 
Luego surgieron los Paralibros, un espacio con 365 títulos distribuidos en un escaparate que simula una parada de un autobús, para que la gente se detenga y tenga la oportunidad de acercarse al libro y leerlo.
 
"Así se generan los centros, que son algo ya más sofisticado, porque ahí se pueden leer libros electrónicos e impresos, además de disfrutar de películas seleccionadas por la Cineteca; también tenemos una especie de cápsulas, en las que los jóvenes se pueden acercar a leer en un lugar un tanto más íntimo, se encapsulan en la lectura y se conectan con el libro".
 
Una de las aportaciones de estos espacios es que ofrecen la oportunidad de atender a un núcleo social como son los jóvenes, cuyo objetivo es el conjuntar a un mayor número de población, pues estiman que cuando menos tendrán un flujo de mil personas al mes, para lo cual se pretende abrir 32 centros, uno por cada entidad federativa, antes de que concluya el sexenio.
 
"La característica de los centros es que no van a estar ocultos ni dentro de un gran recinto. La intención es que sigan a la vista del público, en lugares estratégicos, que pueden ser parques o esquinas de las principales plazas del país, y con gran atractivo para que con ventanales la gente pueda observar lo que sucede".
 
Desde la perspectiva del promotor, los centros de lectura de alguna manera son la antesala de una biblioteca, "por lo que nosotros debemos seguir en lo mismo: donde la gente está, allí deben de estar estos sitios", aunque la intención es adecuarse a los espacios que sean proporcionados por las entidades.
 
"Atendemos a todos los sectores de la población, pero queremos enfocarnos más a los jóvenes, porque es un núcleo que no se atendió durante un tiempo y procuramos que se acerquen a los libros", señaló el promotor.
Hasta el momento ya han sido inaugurados siete Centros de Lectura y Formación Lectora —en Chihuahua, Nayarit, Morelos, Guerrero, Hidalgo y Querétaro, además de que en Oaxaca se abrirá uno más el 20 de enero.
 
Los espacios se nutren con acervos que comienzan con 600 títulos, y conforme pase cada año buscarán sumar alrededor de 200 nuevos títulos, según afirmó Erick Jiménez.
Las Salas de Lectura se convirtieron en un programa emblemático de los esfuerzos de fomento, donde mediadores, gente de la sociedad civil, reúne a vecinos, amigos o familiares en torno al libro, sin importar el espacio o su comunidad.
 
La apuesta es que lo mismo resguarden colecciones de libros, videos, mapas, películas y otros materiales, que se conviertan en centros de estudio y formación lectora y escritora, en lugares de discusión y debate, "puntos de referencia para mirar el entorno".
 
CON FUTURO
Uno de los objetivos de la Dirección General de Publicaciones para 2014 estará en el impulso a los programas de fomento a la lectura: hasta el momento se tienen contadas más de 3 mil 200 Salas de Lectura, 360 Paralibros y hasta Bicilibros. Una de las apuestas es establecer un centro coordinador de estos trabajos en cada una de las entidades, que puede reunir y concretar las actividades en la materia.
 
Sin embargo, las salas de lectura se mantienen como el programa emblemático, porque "representa lo mejor de la colaboración entre el gobierno y la sociedad civil: la gente decide convertirse en mediador y lo único que hace el Conaculta es apoyarla con un curso y un acervo para ser prestado entre sus amigos, vecinos y familiares", explicó Ricardo Cayuela Gally.
 
Los Centros de Lectura y Formación Lectora tendrán características diferentes, si bien su puesta en marcha en lugares como la Feria Internacional del Libro de Guadalajara refleja que el programa tiene futuro, enfatiza el promotor: durante nueve días recibieron a más de 35 mil personas, 18 mil de ellas jóvenes, y "casi todos ellos permanecían alrededor de 45 minutos embebidos en la lectura".

viernes, 17 de enero de 2014

Demostrado: leer estimula las neuronas



Canal lector.- Un equipo de investigación del Basque Center on Cognition, Brain and Language [Centro Vasco de Cognición, Cerebro y Lenguaje] (BCBL) en San Sebastián y dirigido por el especialista en psicolingüística y neurocognición Manuel Carreiras, ha comparado imágenes de resonancia magnética para demostrar científicamente como leer transforma el cerebro por dentro.

Cuando un individuo lee, explica Carreiras en un artículo publicado en la revista cultural de Clarin.com, trabajan tres áreas de la corteza exterior del cerebro. Para llegar a esta conclusión, un grupo de especialistas del BCBL compararon imágenes de resonancia magnética de los cerebros de veinte ex guerrilleros colombianos adultos que habían terminado un programa de alfabetización, con otras que se habían tomado a otros tantos ex guerrilleros analfabetos. Los resultados, que se publicaron en la revista Nature, mostraron cómo se había incrementado considerablemente tanto la materia gris como la materia blanca en las personas alfabetizadas.

Según este psicólogo, cada vez que se lee, el cerebro cambia. “Leer –dice– es para la mente como ir al gimnasio. Desencadena procesos complejos y automatizados. Por eso nos parecen tan simples”. Cuando leemos –explica– escaneamos el texto, de ahí la importancia de la tipografía y el diseño gráfico, por lo que no es exactamente lo mismo leer en un libro, que en internet que en un lector electrónico.

Para ejercitar la memoria y retrasar síntomas de enfermedades como el Alzheimer, Carreiras recomienda leer habitualmente y hablar una segunda lengua. “Leer […] es el combustible de las neuronas”, sostiene.
 
A este estudio, el artículo añade otro realizado en la Universidad de Cambridge según el cual si una palabra viene acompañada de una serie de estímulos no lingüísticos, por ejemplo un olor, un sonido o una sensación, cada vez que nuestro cerebro vuelva a reconocerla, se estimularán también las áreas encargadas de procesar el estímulo no lingüístico asociado.

El retorno de los clásicos





Milenio.com.- Un libro se convierte en un clásico para el público aficionado, el conocedor y para las editoriales en el momento en que sobrevive más allá del tiempo en que fue publicado; más allá de tres generaciones, digamos, aunque es muy discutible. Son libros que sobreviven la prueba del tiempo. Un clásico es ese libro resistente que se niega a desaparecer porque transforma su significado de una manera cíclica”.

Tales son palabras del crítico literario peruano José Miguel Oviedo, uno de los coordinadores de la Colección Clásicos para Hoy, recuperada por la Dirección General de Publicaciones (DGP-Conaculta), pero que podría también aplicarse a los esfuerzos del sello Miguel Ángel Porrúa, donde se recuperó la serie Lecturas clásicas para niños, ideada por José Vasconcelos en 1924.

“Los clásicos son los libros y los autores que ya pasaron la prueba de la posteridad. Si analizas lo que se publica en México, 27 mil títulos el año pasado, ¿cuántos de ellos van a leerse en el futuro? Una minoría. ¿Cuáles se van a leer? Aquellos que siguen vigentes, que su mensaje logró vencer la prueba del tiempo y aunque hablen de su tiempo, se mantienen como textos que nos dicen algo, hoy, a nosotros”, explica Ricardo Cayuela Gally, titular de la DGP-Conaculta.

De alguna manera son palabras contemporáneas de lo que ya pensaba José Vasconcelos cuando planeó la colección Lecturas clásicas para niños, sobre todo a partir de una pregunta que se hace en el prólogo de la edición: “¿Por qué un niño de México atiborrado de textos ha de carecer, sin embargo, de esa amenidad de información literaria que un niño de habla inglesa adquiere desde el tercer año de su enseñanza?”.

A partir de ello, Vasconcelos editó en dos tomos algo de lo que en ese momento se definía como literatura
clásica, en cuya conformación participaron escritores como Gabriela Mistral, Palma Guillén, Salvador Novo, José Gorostiza, Jaime Torres Bodet, Francisco Monterde o Xavier Villaurrutia, los cuales son recuperados por el sello Miguel Ángel Porrúa Librero-Editor.

Con prólogo del mismo José Vasconcelos, contiene textos de Vishnú Sharma, Rabindranath Tagore y Homero, en el primer volumen, mientras en el segundo están representados Miguel de Cervantes, Anatole France, Goethe, William Shakespeare, León Tolstói, Hans Christian Andersen, Oscar Wilde, Alfonso Reyes, José Martí, Vicente Riva Palacio, Carlos Pellicer, Manuel Gutiérrez Nájera, José Martí y Simón Bolívar, por mencionar solo a algunos.

LO DE HOY

A diferencia de la recuperación de los volúmenes por parte de Miguel Ángel Porrúa, Clásicos para Hoy apuesta por reconstruir el canon literario en la actualidad, porque no se trata solo de apretar un botón y ver cómo aparecen: “Hay una disputa sobre cuál es el canon, con lo que construir una colección de clásicos es un reto intelectual”, explica Cayuela Gally.

“De tal suerte que se busca que cualquier mexicano pueda tener una cultura sólida gracias a los libros que le brinda el gobierno, de su país, de su cultura más próxima y del mundo, además en grandes tirajes, accesibles de precio, muy cómodos y muy fáciles de leer, y con versiones en formato digital todavía más barato, porque ahí no debemos pagar ni bodega ni distribución.”

Entre las publicaciones más recientes de la colección se cuentan los libros Cantos de vida y esperanza, de Rubén Darío; Las minas y los mineros, de Pedro Castera; Por estas regiones que no quiero describir, de Guillermo Prieto; La reliquia, de José Maria Eça de Queirós, y Nocturno peregrino, de Salvador Díaz Mirón.

“Una colección de clásicos al servicio de la cultura de los mexicanos, para que todo mundo pueda tener una gran formación intelectual con los libros que el Estado le brinda, de una manera barata y accesible, al tiempo de apoyar a la industria editorial a través de las coediciones”, en palabras de Cayuela Gally.

ASPIRAN A EDITAR 360 TÍTULOS

El mercado de los clásicos solo representa uno por ciento de todo el mercado editorial, por lo tanto no se compite con ningún otro sello. Esa es una de las tareas primordiales de la Dirección General de Publicaciones del Conaculta en la presente administración, bajo la creencia de que en el pasado se daba una competencia con los editores privados, “teniendo más potencia económica y, al mismo tiempo, menos condiciones para hacer un buen trabajo editorial”.

De acuerdo con Ricardo Cayuela Gally, en el pasado se hacían muchos libros como si los produjera una editorial cualquiera: al arribar a la dirección se encontró con 23 colecciones, “y tuve la instrucción de simplificar, racionalizar y pensar para qué edita el Estado mexicano, cuál es su papel”.

“Así fue como construimos la convocatoria pública de coediciones, que apoya a la industria editorial en lugar de competir con ella, que transparenta la entrega de los recursos. Entonces ¿qué publica el gobierno? Los clásicos, aquellos autores y libros que ya pasaron la prueba de la posteridad.”

Dentro de la colección de Clásicos para Hoy se pretende editar al menos 360 títulos en la presente administración, los cuales aparecerán al mismo tiempo en su formato digital, con la intención de llegar a un mayor número de lectores.

La RAE festeja 300 años con sello postal





El Universal.- El organismo de Correos ha querido rendir homenaje a la Real Academia Española en su tercer centenario y, por ese motivo, ha puesto en circulación un sello conmemorativo de esta efeméride, que se ha presentado hoy en la sede de la RAE.
 
El acto ha congregado a académicos, a benefactores de esta institución y a representantes de diversos organismos y ha estado presidido por el presidente de Correos, Javier Cuesta; el director de la Academia, José Manuel Blecua, y el secretario de la misma, Darío Villanueva.
 
En el sello aparecen letras sueltas del abecedario y tres ejemplares del Diccionario de la Real Academia Española, ordenados como números romanos, que dan fe del tercer centenario de esta institución y de su principal misión: elaborar esa obra esencial de referencia para millones de hispanohablantes.
 
La Academia comenzó a funcionar en agosto de 1713, fundada por Juan Manuel Fernández Pacheco, marqués de Villena, y fue en octubre de 1714 cuando el rey Felipe V aprobó oficialmente su constitución mediante una cédula real.
 
Esas dos fechas han acotado en cierto modo la celebración del tricentenario, que comenzó a finales de septiembre de 2013 con una gran exposición, que todavía puede verse en la Biblioteca Nacional y que se clausura el próximo 26 de enero.
El broche final será la publicación de la nueva edición en papel del Diccionario, el próximo mes de octubre. Contendrá unas 90 mil voces, entre ellas un buen número de novedades.
Como subrayó Darío Villanueva, la Academia ha querido que su tercer centenario logre la debida repercusión en la sociedad y no pase "sin pena ni gloria", como sucedió con el primero y el segundo. En 1814, España padecía la invasión francesa, y un siglo más tarde estallaba la Primera Guerra Mundial.
 
Ahora, aunque las cosas "no van bien" en España debido a la prolongada crisis económica, la RAE "no quería dejar pasar esta ocasión" y ha organizado numerosas actividades en reconocimiento a la labor desarrollada por los académicos a lo largo de tres siglos.
 
Con esas iniciativas, la Academia "lanza un mensaje a la comunidad hispanohablante", y a la difusión de ese mensaje contribuirá sin duda el sello emitido por correos. Una palabra, la de "sello" , que en Hispanoamérica se llama "estampilla", como recordó José Manuel Blecua.
 
Y, si uno rastrea la palabra "sello" en la historia de la lengua española, comprobará que está documentada por primera vez en el siglo XIII, en Los milagros de Nuestra Señora de Gonzalo de Berceo, señaló el director de la RAE.
 
Blecua considera que la historia del correo marítimo es "interesantísima para la historia de la lengua española", como refleja, por ejemplo, la colección de cartas que conserva el Archivo de Indias de Sevilla.
 
Esas cartas fueron escritas por los que emigraron a América a raíz del descubrimiento y sirven para documentar la evolución que fue experimentando el español de Andalucía y de otras regiones en aquellas tierras.
 
El presidente de Correos se remontó a la época romana para situar los orígenes del oficio de portador de cartas. El servicio de correos fue evolucionando en España con el paso de los siglos y en 1716 adquirió carácter estatal.
 
Los sellos son "piezas clave en las comunicaciones personales y comerciales. Son mensajeros de la lengua, la historia y la cultura", subrayó Javier Cuesta.

lunes, 13 de enero de 2014

Christopher Platt: el bibliotecario del futuro añadirá conocimientos del espacio virtual







Christopher Platt, director de BookOps –los servicios técnicos compartidos entre las bibliotecas públicas de Nueva York y Brooklyn– cree que el bibliotecario del futuro añadirá a su cometido "capacidades nuevas, nuevos conocimientos de lo que significa estar en un espacio virtual además de un espacio físico y cómo ambos pueden funcionar juntos, que es algo muy importante".
 
En una entrevista para Canal Lector, Platt afirma que "el bibliotecario del futuro tendrá las mismas capacidades que los bibliotecarios de ahora". Entiende que ellos "tendrán pasión por cualquier aspecto que les motive a trabajar con las bibliotecas, sea conectar libros con personas, que es mi pasión personal, sea educar a las personas para ser más cultos, aprender idiomas o mejorar su educación para obtener un trabajo mejor, o cualquier actividad bibliotecaria por el estilo".
 
También está convencido de que "el bibliotecario estará involucrado con la comunidad que le rodea".
 
Platt subraya que estas son las cosas que tiene la biblioteca de hoy, y que seguirá teniendo en el futuro aunque cree que "lo que se añadirá son capacidades nuevas, nuevos conocimientos de lo que significa estar en un espacio virtual además de un espacio físico y cómo ambos pueden funcionar juntos, que es algo muy importante".
Para él, esta es la parte "más emocionante, porque todavía estamos aprendiendo cómo funcionarán juntos el espacio físico y el espacio virtual, y cual será el papel de la comunidad".
 
En cuanto a la Biblioteca Pública de Nueva York, señala que la institución ha participado en varios proyectos que obtienen información directamente de los miembros de la biblioteca, de los propios lectores.
 
"A veces –dice– son de la misma zona, a veces son de todo el mundo, sobre todo cuando se trata de proyectos en línea". En su opinión estos lectores "contribuyen con información a la biblioteca y en este sentido, el bibliotecario también es un lector, y el lector es un bibliotecario, ya que ambos contribuyen a crear y compartir contenido. Así el trabajo del bibliotecario es más fácil y la experiencia dentro de la biblioteca más poderosa".